Explorando las técnicas de mindfulness para reducir el estrés y la ansiedad en el trabajo o emprendimiento

Bienvenida de nuevo a nuestra serie sobre MINDFULNESS EN EL TRABAJO. Esta semana, hablaremos sobre la gestión del estrés en el entorno laboral y cómo el mindfulness puede ser una herramienta invaluable en este proceso.

El estrés y la ansiedad en el trabajo son problemas comunes que pueden afectar negativamente nuestra salud física, mental y emocional. Sin embargo, el mindfulness ofrece un enfoque efectivo para abordar estos desafíos.

Aquí hay cinco técnicas de mindfulness que puedes incorporar en tu rutina laboral para gestionar el estrés de manera más efectiva:

  1. Respiración de conteo: Si te sientes abrumada por el estrés, tómate un momento para realizar una respiración de conteo. Cierra los ojos y presta atención a tu respiración, sintiendo cómo entra y sale el aire de tu cuerpo. Inhala profundamente durante cuatro segundos, mantén la respiración durante cuatro segundos y luego exhala durante cuatro segundos. Repite este proceso varias veces para calmar tu sistema nervioso.
  2. Escaneo corporal: Realiza un escaneo corporal breve durante tu jornada laboral. Tómate unos minutos para cerrar los ojos y dirigir tu atención a diferentes partes de tu cuerpo, desde la cabeza hasta los pies, notando cualquier sensación física que puedas experimentar. Esta práctica te ayuda a conectarte con tu cuerpo y a liberar la tensión acumulada.
  3. Atención plena en las tareas: Practica la atención plena mientras realizas tus tareas laborales diarias. En lugar de dejar que tu mente divague o te preocupes por el futuro, concéntrate completamente en la tarea que estás realizando en ese momento. Nota los detalles, las sensaciones y las emociones asociadas con la tarea, sin juzgar.
  4. Pausas conscientes: Programa pausas de 5 minutos durante tu día de trabajo para realizar ejercicios de mindfulness. Puedes hacer una caminata breve al aire libre, practicar estiramientos suaves o simplemente cerrar los ojos y enfocarte en tu respiración durante esos minutos.
  5. Ejercicio de gratitud: Toma un momento al final de cada día para reflexionar sobre tres cosas por las que te sientes agradecida en tu trabajo o emprendimiento. Pueden ser pequeños momentos de satisfacción, logros personales o conexiones significativas con colegas. Practicar la gratitud puede ayudarte a cambiar tu enfoque hacia lo positivo y reducir el estrés acumulado.

Recuerda que el mindfulness es una habilidad que se desarrolla con la práctica constante. Al integrar estas técnicas simples en tu rutina laboral, puedes cultivar una mayor calma, claridad mental y resiliencia frente al estrés.

Espero que encuentres útiles estos ejercicios de mindfulness y que te ayuden a gestionar el estrés en tu entorno laboral de manera efectiva. Mantente atenta para la próxima entrega de nuestra serie, donde exploraremos cómo el mindfulness puede mejorar tu creatividad y enfoque en el trabajo.

Feliz miércoles de bienestar.

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Con en alma, Eri

Erika Amaya